miércoles, 27 de enero de 2016

Retransmitiendo el Génesis




Por Oscar López

Aunque definitivamente no viví la época de los llamados “fabulosos sesentas”, debo confesar que la música pop-rock-blues-folk-etc. creada en esos años me fascina y que por supuesto a la fecha sigo escuchando, aún tengo esa costumbre. Seguramente lo empecé a hacer gracias a mi papá que solía comprar algunos discos además de una tía que regularmente sintonizaba Radio 590 La Pantera, Radio Éxitos o Radio Capital; todas ellas sonando en la amplitud modulada, muy populares todavía en los setentas y ochentas. En ese entonces, escuchaba esas estaciones como música de fondo mientras yo hacía tareas o jugaba con mis hermanos y primos, de hecho las rolas me gustaban pero por supuesto no sabía nada de las canciones ni los intérpretes.

Ya a mediados de los ochentas, descubrí Rock101 en la FM y con ello la música de mi generación, pero también las ideas musicales que me recordaban esos episodios de mi infancia, así que me encantaban esos programas que invocaban al espíritu de los 60s con Radio Alicia y las cápsulas del rock and roll encapsulado y hasta las viñetas en las Ideas Musicales que nos daban información de las rolas. Eso era fantástico.

En particular ese locutor de apellido Pontones, que se dejaba escuchar en Rock 101 con esa característica y mormada voz, le daba la tonalidad, el sabor y el matiz adecuado a cada una de esas rolitas sesenteras, al presentarlas y explicarlas, incluyendo desde luego el texto y el contexto. Además nos daba buenas muestras con maravillosos promos del Tiempo Alterado, Radio Alicia y qué decir del programa Utopía.

Y fue entonces que aprendí que Clapton, aún en su época cremosa, tocó su majestuosa lira en While My Guitar Gently Weeps (sí, con The Beatles!) y que la canción Martha My Dear en realidad no fue dedicada a un amorío de Paul McCartney sino a su perrita pastor inglés (chale!). Claro está que en esa época no existía el Wikipedia ni nada por el estilo para conocer más de las bandas además de su música, a lo más contábamos con el notitas musicales y, en el mejor de los casos, con la revista Conecte.



Ya finalizando los ochentas, con ese boom del Rock En Tu Idioma, le entré bastante a la onda del rock en español y por supuesto que Espacio 59 se creó como anillo al dedo para escuchar todas esas rolas que se cantaban no solo en Siempre en Domingo sino además bastante música alternativa y desconocida, eso sí, cantada en nuestro idioma. Esto pasaba en la AM pero con el patrocinio de Rock101, así que eso ya era garantía.

Y de pronto, un cambio radical en esa frecuencia de amplitud modulada y aparece Radio Alicia. En un principio me sacó de onda saber de este cambio tan abrupto, debo confesar que al principio me molesté por ello, pues creí que era una mala jugada sabiendo que el boom del rock en español estaba todavía sucediendo, pero al paso del tiempo entendí que ahora ese espacio pertenecía nuevamente a la música de los sesentas y con ello la retransmisión del génesis. Nuevamente lo celebré.

Al paso del tiempo, incluyendo la finalización de Radio Alicia en AM, escuchar esa musiquita, como dice Pontones, y poner mis disquitos, como también dice Pontones, siguió siendo una buena costumbre para mí. De hecho todavía lo es aunque ahora también existen los Spotifys, los iTunes, los TuneIns y los Rock101s.com, que también nos permiten redescubrir esa maravillosa música y entonces una y otra vez más, retransmitir el génesis.

Qué buena costumbre!